Estrategias de Aprendizaje Significativo
Para
el desarrollo de una práctica educativa, orientada a precisar los objetivos
curriculares en el campo de las ciencias sociales, bajo la dirección del
aprendizaje significativo, conduce a gestionar la organización de aquellos
eventos ajustados a ciertas características que predominan en su enseñanza. Es
así como, Peralta (2010:32), define las estrategias de enseñanza “como los
procedimientos o recursos utilizados por el agente de enseñanza para promover
aprendizajes significativos”.
En
este orden de ideas, se puede indicar que según la visión conceptual que se
desprende del aprendizaje significativo, donde es relevante observaciones
previas y el contacto con el entorno, se precisan a continuación una serie de
estrategias fundamentadas en dicha corriente, las mismas, se toman en función a
los criterios preestablecidos por Ausubel (1964), al destacar que mediante el
aprendizaje significativo hace posible:
a) Presentar la información al
aprendiz como debe ser aprendida, en su forma final (recepción). b) Presentar
temas usando y aprovechando los esquemas previos del estudiante. c) Dar cierta
información al estudiante provocando que éste por sí mismo descubra un
conocimiento nuevo (descubrimiento). d) Proveer información, contenidos y temas
importantes y útiles que den como resultado ideas nuevas en el alumno. e)
Mostrar materiales pedagógicos de forma coloquial y organizada que no
distraigan la concentración del estudiante. f) Hacer que haya una participación
activa por parte del estudiante. (p.189)
Al tomar en cuenta estas apreciaciones
y vincularlas con los contenidos curriculares que demanda la enseñanza en la
asignatura geografía e historia, se consideran importante la presencia de
estrategias pre-instruccionales, y para activar información, las cuales, se
consideran fundamentales para el desarrollo de la presente investigación, las
mismas son citadas a continuación:
Estrategias
Pre-instruccionales
En
el campo de la enseñanza para lograr resultados ajustados a los criterios del
aprendizaje significativo, se hace necesario organizar las estrategias pre-instruccionales,
que como su nombre lo indica, están estrechamente relacionadas con el inicio de
la acción educativa, el docente debe antes de incursionar en contenidos
particulares, llevar a los estudiantes a buscar en sus conocimientos previos
informaciones vinculante a la temática por realizar. En este sentido, Barriga
(2005:258), define a las estrategias pre-instruccionales “como aquellas
dirigidas a activar los conocimientos previos del estudiante o generarlos
cuando no existen”.
Ante
este planteamiento, se considera pertinente la selección de un grupo de
estrategias pre-instruccionales ajustadas a los contenidos curriculares que
caracterizan a la geografía e historia en la educación universitaria. Por ello,
se hace inminente la presentación de ilustraciones, mapas, imágenes, pistas
tipográficas entre otras, encargadas de facilitar al estudiante la
identificación de ciertos elementos y al mismo tiempo logren relacionar hechos
de manera precisa. Tal como lo indica, Castillo (2010:89), “son estrategias que
desarrollan las capacidades perceptivas del estudiante, logran dinamizar el
aprendizaje pues, su memoria se convierte en un agente que divulga
informaciones y combina con las nuevas”.
En
este sentido, dichas estrategias pueden emplearse en los diferentes momentos de
la enseñanza, mediante su incorporación se logra que cada estudiante realice
representaciones viso-espacial, estimule sus representaciones lingüísticas al
momento de llegar a elaborar resúmenes, cuadros sinópticos. Según González y
Díaz (2005:55), este tipo de estrategia “promueve el enlace entre los
conocimientos previos y la nueva información que se ha de aprender”.
En
otras palabras, son estrategias destinadas a crear y potenciar enlaces
adecuados entre hechos, acontecimientos, eventos, fenómenos, características de
un espacio geográfico, valoración de un suceso histórico donde se hace
necesario la observación previa para determinar sus causas y consecuencias.
Asimismo, González y Díaz (2005:55), indica que las estrategias
pre-instruccionales “hacen posible que el estudiante llegue a codificar,
elaborar y organizar la información que debe aprenderse y por ende propicia un
mayor contexto organizativo de la información adquirida al momento de tener que
representarla gráficamente o escrita para así dar apertura al aprendizaje
significativo”.
Según
estas consideraciones, se precisa que mediante la introducción de las
estrategias pre-instruccionales el docente hace posible que los estudiantes
consoliden sus destrezas cognitivas, dado que, observan, combinan ideas,
precisan de manera descriptiva los elementos de un hecho, caracterizan
situaciones sociales, políticas, económicas y educativas mediante la
argumentación para asegurar con ello el desarrollo de sus competencias
lingüísticas.
En
relación a estas ideas, Fernández (2008:45), afirma que la cognición permite la
organización efectiva de la realidad interna y externa, mediante la cual,
precisa sus potencialidades intelectuales y competencias emocionales que le
aseguran construir el conocimiento significativo”. Es decir, a través de las
estrategias pre-instruccionales, el docente motiva al estudiante a organizar
sus ideas, precisar informaciones y desarrollar nuevos criterios fundamentales
que darán como resultado la presentación de situaciones innovadoras capaces de
ayudarle a comprender los sucesos desde la visión integradora del
acontecimiento geo-histórico.
Es
importante destacar que, además de las estrategias pre-instruccionales el
docente universitario para afianzar las competencias intelectuales del
estudiante durante la interrelación con los contenidos de geografía e historia,
es relevante incorporar las estrategias para activar información.
Estrategias
para Activar Información
Para
llegar a tener resultados efectivos durante la interconexión con las
informaciones a brindar en el aula, se hace determinante que el docente maneja
adecuadamente estrategias de enseñanza dirigidas a activar sus estructuras
cognitivas relacionadas con la asociación de ideas, sólo mediante este proceso
intelectual, se puede apoyar la construcción del conocimiento significativo.
Tal como lo indica, Ausubel (1964:369), las estrategias para activar
información “son medios importantes que aseguran el aprender a aprender, pues,
facilitan aquellos procesos relacionados con la asimilación entre los
conocimientos previos e información nueva”.
En
función al planteamiento anterior, se precisa que mediante la introducción de
las estrategias de activar información, tales como: lecturas, elaboración de
mapas conceptuales, analogías entre otros, permite al estudiante manejar en
forma paulatina las ideas que posee, compaginarlas con las que proporcionan en
el aula, para dar como resultado la construcción de la información en forma
precisa, coherente y estrechamente relacionada con las capacidades cognitivas
que posee el estudiante.
Al
respecto, Meyer (2006:25), plantea que las estrategias para activar información
“responden mucho a la organización de los contenidos programáticos, el docente
debe mirarlos para luego buscar entre ellas, la acción eficiente que le dará
como respuesta un aprender a aprender”. Es decir, mediante el desarrollo de la
enseñanza bajo este modelo de estrategias, se logra dinamizar el encuentro
entre las nuevas informaciones y aquellas existentes, dando respuestas
efectivas durante el contacto con los contenidos a estudiar.
De
las consideraciones anteriores, se desprende que una estrategia para activar
información, no es más que una guía de acciones a seguir y se realiza antes de
realizar la selección del contenido respectivo. Por ello, González (2010:6), las define como
“aquellas que permiten activar los conocimientos previos cuando no existen”. De
allí, que su selección en la dinámica escolar, hace posible motivar al
estudiante a mantener contacto con el material, acelerar su actuación ante
hechos particulares y llevarlo a edificar apreciaciones que dan como resultado
el aprendizaje significativo.
Este
mismo autor, destaca que las estrategias para activar información, se
encuentran vinculada con aquellas acciones pedagógicas que se encaminan hacia
la construcción de simulaciones y exploraciones encargados de permitirle
interactuar con posibles elementos y relaciones que presenta un acontecimiento.
Según estas ideas, al buscar que el estudiante aprenda los contenidos referidos
a la geografía e historia es importante llevarlos a crear simulaciones, generar
visualizaciones donde prevalezcan sus ideas previas con respecto a un hecho o
fenómeno.
Asimismo,
plantea González (ob.cit:14), que toda estrategia para activar información debe
ser conducida mediante la utilización de técnicas, entre ellas la discusión socializada”.
Es importante comprender que mediante esta combinación, el docente logra
activar los conocimientos previos a través de la participación interactiva,
promovida mediante la utilización del diálogo acerca de un tema en particular.
Cada
uno de los planteamientos descritos en párrafos anteriores, llevan a considerar
pertinente la introducción de las estrategias para el aprendizaje, vista por, González
y Díaz (2005:47), “como un conjunto de pasos o habilidades que el estudiante
adquiere y emplea en forma intencional como instrumento flexible para aprender
significativamente y solucionar problemas”. Por tanto, para llegar a responder
a los objetivos instruccionales se hace necesario buscar mecanismos pedagógicos
ajustados a las características de los grupos, que permitan reconocer sus
competencias y dirigir el trabajo académico hacia la consolidación del
aprendizaje significativo.
Por
ello, los procesos cognitivos son fundamentales para que cada estudiante logre
construir la información de manera efectiva, tal como lo resalta Flavell y Wellman, 1977), quienes consideran que a través
de las estrategias de aprendizaje, el estudiante llega a cumplir lo siguiente:
Procesos cognitivos básicos encargados de elevar el procesamiento
de la información, codificación, almacenaje y recuperación, base de
conocimientos relacionados con el bagaje de hechos, conceptos, principios que
posee. Conocimiento estratégico caracterizado directamente por la incorporación
de la estrategia de aprendizaje y conocimiento metacognitivo, vinculado con
aquel conocimiento que tiene el estudiante mediante el cual logra recordar
ciertas situaciones importantes. (p.25)
Al analizar este contenido, se evidencia que la incorporación de
las estrategias para activar la información hacen posible estimular en los
estudiantes sus propias habilidades y destrezas para organizar la información,
evocar, retroalimentarse, elaborar nuevos conceptos que se logran mediante la
incorporación de otras estrategias de aprendizaje ajustada a sus propias
competencias intelectuales para asegurar con ello, lo planteado por, Guédez
(2012:1), “las estrategias de aprendizaje son medios acertados que permiten al
estudiante saber, cómo conocer”.
Cada uno de los planteamientos anteriores, permiten destacar que la
incorporación de las estrategias de enseñanza y aprendizaje, hacen posible
conducir en las universidades los contenidos programáticos en la asignatura
geografía e historia en función no sólo a las competencias intelectuales del
estudiante, sino a las realidades socio-geográfica que demanda el país, en
otras palabras, son actos mediante los cuales, se asegura el progreso inmediato
del estudiante hacia la construcción del verdadero aprendizaje significativo y
con ello alcanza el éxito académico, pues, se agiliza la comprensión de hechos
políticos, sociales, culturales, religiosos, geográficos, históricos de la
nación bajo una concepción innovadora alejada de la visión arcaica que posee la
geografía e historia.
Licda.Iraima Montes